Breve Resumen

      Hoy quiero hacer un brindis por el 2011. Por la noche en la que rompimos la pista de aquel local bailando hasta casi el amanecer, se dieron abrazos eternos y se chocaron mil copas en el cielo. Por el inicio de curso con el ánimo cogido en las vacaciones y todo los momentos que pudimos un grupo de siete personas pasar en las cuatro paredes de una clase que no ofrecía más que desgracia pero que a nosotros se nos antojaba graciosa en cada esquina, por un febrero lleno de comparsistas con mucha emoción y chirigotas que sacaban su corazoncito, meses fríos de invierno cogida de su mano, una semana santa pasada por agua y la cara de cientos de almas llorosas al ver que el destino de su cofradía ese año sería lluvioso, nuevos sentimientos que nacían junto a las primeras flores que nacían de la primavera, el pensar que podría ser una parte de mí (cosa que se antojaba imposible), unas notas y un verano por delante lleno de oportunidades.. un verano que ofrecía nuevas experiencias, nuevos lugares por visitar, nuevas sonrisas que captar y rico sabor a amistad y compañerismo. Un fin de verano y un comienzo de curso, quizás el más difícil, pero el más especial con las chicas de siempre. Por un momento el poder recapacitar en la idea de que al final el amor no te fallaría, que todo saldría bien.. para volver a estrellarse de nuevo en la colina de los desengaños; salida del hoyo gracias al coraje y la paciencia de la gente que te escucha. Una llegada improvisada del otoño nos pilló besándonos en un escalón, corriendo de nuevo por las páginas de la vida ya escrita en el destino y un coche salpicándonos verdad. Días cada vez más cortos y cafés cada vez más calientes. Lluvias fuertes atronaban la ciudad y cuando salió el sol, la plaza blanca tomó protagonismo dándonos largos días de buen humor y unidad que el viento se llevó tan pronto como pudo. Nuevos grupos y nuevas decisiones por tomar. Última semana de exámenes y los huevos en la garganta. Astucia, mal humor, madrugones y, de vez en cuando, un golpe de suerte se sorteaba en nuestras cabezas. Unas notas y un feliz navidad a la hora de salir de aquel instituto. Más de tres días durmiendo. Comiendo al máximo. Aprovechando todo lo que no habías desechado en aquella semana. Descanso de dioses y comida para un regimiento. Días después, una nochebuena cargada de abrazos, reencuentros, emociones, y también, discusiones. A punto de acabar el año, el día se presenta interesante.. qué puedes contarme tú¿? Feliz Año Nuevo a todos y cuidado con las uvas traicioneras.

Eres especial

     Recorrer miles y miles de kilómetros sólo por abrazarte, por tenerte entre mis brazos, agarrar tu mano y salir corriendo por campos verdes y planos para poder descansar en tu mirada. Caer juntos y llorar de la risa. Señalar en el cielo las formas de cada una de las nubes que nos tapen el maravilloso sol de Agosto e imaginar que cada uno tiene la suya, que cada uno puede dominar una nube y volar en ella. De repente, un silencio sepulcral entre tu boca y la mía y el impulso de besarte hasta borrar huellas pasadas, hasta que nos unamos el uno al otro y perdamos el sentido. 

:)

     No esperes el momento perfecto, coge el momento y hazlo perfecto.

     No pido más que unas sonrisas de vez en cuando, un "te quiero" cuando más lo sientas y un "¿estás bien?". Van pasando los días y más cuenta te das de que las cosas no duran para siempre. Yo nunca dejé de pensar que algo tan fuerte y sincero como una amistad pudiese romperse tan rápido y a la vez tan despacio, tan despacio que cada pedazo de esa amistad que va cayendo al suelo va acompañada de una noche riendo y llorando sola recordando un día que pasaste con aquella persona. Todas las palabras que se dijeron, comentarios que te hicieron llorar de la risa, abrazos de despedida, ayuda sin pedidas y "luego hablamos" desde el camino.... ¿Dónde están ya? Os puse desde un principio en mi número uno de preferencias y llegan nuevas personas a vuestras vidas y me coloco en último lugar de la vuestra... No creo que pida tanto, sino que todo vuelva a ser como antes... Por favor

Miradas que callan, silencios que gritan, besos que amargan, caricias que excitan, pensamientos que confunden, palabras que enamoran, sonidos que te transportan, luz sin Sol, noche sin Luna, amanecer sin anochecer, la colilla de tu cigarro encendida en la oscuridad, melodía que recorre tu cuerpo, sentimientos que enganchan..

La despedida

Mientras haya ciudades, iglesias y mercados,
y traidores, y leyes injustas, y banderas;
mientras los ríos sigan vertiendo su basura
en el mar y los vientos soplen en las montañas
mientras caiga la nieve y los pájaros vuelen
y el sol saga y se ponga, y los hombres se maten;
y dibuje en el aire la V de la victoria;
mientras vivan el odio, la amistad y el asombro,
y se rompa la tierra para que crezca el trigo
mientras tú y yo busquemos el medio de encontrarnos 
y nuestro encuentro sea poco más que silencio,
yo te estaré queriendo, vida mía, en la sombra,
mientras mi pecho aliente, mientras mi voz alcance
la estela de tu fuga, mientras la despedida
de este amor se prolongue por las calles del tiempo.
- Luis Alberto de Cuenca: El otro sueño

My new project

      I’m Elena and here’s my latest blog. You’ll know that I’m “a writer” if you’ve been reading this page regularly. For you, my dear reader, I’ve got some news! My first thought about this came to me the last month.

     At the beginning of November, I passed my nights searching some writers who had my age and the results were surprising! A lot of teen-writers, like me, post every day amazing texts in their blogs that count their feelings, anecdotes, days to remember…A few minutes later, when I was reading a book in my bed, I thought about the idea of creating my own book! The next summer, I'm going to write my book. I can't wait to start!

     So, my readers, keep watching this blog because in a couple of days, I’ll post more information for my book! Find out more about my plan on my next post.

Me rindo

     Y el juego se ha acabado. Y no me da miedo reconocer que me rindo. Que cada día que pasa siento que te quiero más y que lo que siento por ti me está quemando por dentro. Es verdad que lo nuestro está prohibido, pero no me imagino ahora mismo otro destino sino vas conmigo. Los días pasan y pasan, y todo se convierte en un bucle de lágrimas y palabras que llenas los huecos que otros habían dejado en mi corazón. Tú me cuidas, tú me mimas, tú me das lo que quiero y querré. Ahora pienso en estar agarrada a tu cintura todos los días de mi vida... ¡Qué locura! ¿Verdad? En los días fantásticos que podríamos pasar viajando por el abismo que nos separa y por las sendas que siempre nos acaban llevando al mismo sitio.
- No quiero que te vayas
- Pues vente conmigo
- Ojalá...
- Pues vente conmigo
    Y de repente, el silencio nos dejó mudos, enfundados en el chaleco de las caricias y los te quiero, dejando pasar el poco tiempo que nos quedaba juntos fantaseando con la idea de estar así toda una vida cuando, sin quererlo, y a la vez, sin poder evitarlo, aquel grito sordo salió del tren que se aproximaba lentamente. Un beso en la mejilla, una mirada llena de sentimientos y un adiós antes de subir.

     Ninguna distancia está lejos

     
     For one minute please, stand here in silence and look at the sky, and comtemplate how awesome life is.

Es lo que hay

     Siete de la mañana, mi reloj suena y mis sentidos empiezan a despertar. Su imagen se clava en mi mente al abrir un día más los ojos a la vida. Un triste vaso de leche y la primera ropa que pille en el armario. ¿No voy conjuntada? Que más me dará eso a mí. Los auriculares en mis oídos y música de fondo, siempre música de fondo. Seis horas que, algunos días se hacen eternas y otros, parecen pocas y, de nuevo, la pregunta... ¿Llegaré finalmente a lo que quiero en la vida? Habrá que ver el vaso medio lleno. Un día menos para la cuenta atrás y para dejar esta ciudad que, a excepción de unas amistades de las que ya no quedan, sólo me ha dado problemas. Música en mis oídos de camino a casa. Una comida acompañada de vasos de sonrisas ficticias y platos llenos de engaño. Y caigo de nuevo aquí, en el sofá. Me siento y espero. Espero un cambio que, quizás, nunca llegue. O que quizás está tan cerca de mí que no puedo verlo. Quizás mañana sea diferente. Dicen que la esperanza es lo último que se pierde no? En fin, un beso 

Un día como otro

     Me apetecía hoy escribir. Contar cosas que seguramente diga todos los días que escribo en este blog. Que le quiero ¿Que repetido está eso ya no? Pero es así. Más que hechos, puedo dar palabras de eso. Aquí sentada en el sofá, la vida se ve de otra forma mientras la música invade tu cuerpo y marca tus sentimientos a la vez que voces preciosas recitan poesía cantada. Pero hoy no. Hoy no me apetece estar quejándome de un amor imposible. Hoy me apetece ser yo. Me agradaría mostrar realmente de lo que estoy hecha bajo estas líneas escritas con Maná de fondo. Me gustaría contar las ganas que tengo hoy de llorar y gritar al mundo el dolor que tengo dentro. Pero bueno, todos tenemos problemas en esta vida y muy pocos son los valientes de quejarse porque bonico es el que se queja ahora... que hasta de la conexión a Internet tenemos quejas diarias. Un beso a todos

Emmm sí.

     Cuando estás con esa persona, que se ha ganado el título de "especial" en tu corazón, quieres congelar el tiempo en sus brazos. 

El hermano que todos querrían tener..

 

     Sí, es él. Aquel que me ha acompañado desde el principio de la andadura. Al que le debo lágrimas, pero también el triple de sonrisas. Parece mentira que fuera ayer cuando se tropezó en mi camino y a día de hoy, siga conmigo. Pocas palabras me quedan que decirte, pero muchos hechos aún por demostrarte y muchos fines de semana que serán nuestros. Te quiero hermano

Mío...

     Deseé con todas mis fuerzas que aquel momento fuera interminable. Una de sus manos rozaba mi cara mientras sus labios besaban los míos con tranquilidad, y la otra caía suavemente bajo el amparo de mi cintura, ansiosa a la espera de su tacto. Por un instante, abrí mis ojos y no, no estaba soñando. Él era quien estaba dándome aquellos besos, quien me miraba con dulzura y quien me sonreía cuando tocaba su nariz. Era él. No hacía falta imaginar que lo tenía, pues ya era mío...

Un pequeño gran problema

     Hay muchas cosas en mi vida que resaltar. Pero ahora mismo, lo único que, de verdad, es importante es que tengo un problema. Un gran problema. El problema es que le quiero. Le quiero con todas mis fuerzas. Paso las noches imaginando que está conmigo al otro lado de la almohada y que puedo besarle en las noches con dulzura en los labios y en sus rosadas mejillas. Que quiero coger su mano cada vez que me sonría y abrazarle cuando me diga que me quiere casi tanto como yo. Me gustaría pasear por los parques riendo a su lado  y no tener que soñar que todo eso sólo pasa en mi mente porque está realmente conmigo. Que le miro y veo en su persona el futuro y a la persona a la que deseo..

Maldita improbabilidad

El Sol llevaba varias horas dormido bajo el reflejo de la Luna cuando tú y yo nos dimos la mano. Nos escabullimos en los relámpagos de la tormenta que golpeaba fuermente nuestros cuerpos, desnudos y frágiles, ante la mirada escondida de aquel astro que nos vigilaba desde lo más alto del cielo. Nuestras miradas fueron una y nuestros corazones hicieron el pacto de quererse para siempre. Corrimos por las calles como si la vida nos fuera en ello, bailamos encima de las rotondas mil y un vals, tocamos mil sueños con los dedos deshaciendonos de ellos cada vez que nuestros labios se encontraron, saltamos mil obstáculos y nos reímos de nuestro pelo bajo la lluvia. Cariño, ¡Qué fácil resulta imaginar una vida contigo! Y que difícil es pensar que nada de ésto ocurrirá...¿Verdad? Pero...¿Sabes algo? Nunca dejaré de intentarlo.

Stay with me

     Fingir que las cosas no duelen, que los sentimientos no hablan por sí solos y que las palabras no arañan en las heridas del pasado. Dibujar una sonrisa en la cara y soñar que todo ésto es irreal, que nada de ésto está pasando, que voy a despertar de un sobresalto cual pesadilla y notaré que nunca te has alejado realmente de mí. Agarrar tu mano con fuerza, que apriete, y que nos una para siempre. Siento ese ahogo cuando te veo, que me descubre de nuevo lo improbable que es algo como el estar contigo y poder ser felices. No importan críticas, no importan comentarios, no importan gestos, sólo nos importa ésto. Háblame, mírame, quiéreme... pero sobre todo, quédate.

You and I

     Simplemente, me gustaría abrigarme con tu piel en invierno y anidar en tu pelo en verano, para que la brisa del viento se cuele y me haga sentir el frescor de las noches en las que el sol se esconde más tarde. Buscarte en mis sueños y encontrarte de mi mano paseando por la realidad. Bailar agarrada a tu cintura y girar lentamente arrojándome a tu cuello, tocando tu cintura. Cayendo sensualmente por tu boca a la vez que tus manos rodeaban mi espalda con firmeza. Poder contemplar aquellos ojos que se me antojaban preciosos y me hipnotizaban cada vez que había una mirada que se cruzaba entre nosotros.. 21 guns..

     Y es que se me llenan los ojos de lágrimas al darme cuenta de la realidad. De la puta realidad. A veces parece que es mejor esperar a que el tiempo se lleve todo lo malo y todos los recuerdos que un día no quisiste crear pero que, sin comerlo ni beberlo, aparecen en tu vida muchas situaciones que te hubiese gustado eliminar. Recuerdos, instantes, lágrimas, palabras... todas esas cosas que en un pasado te hicieron daño y hoy día, sientes con dolor arañando tu alma y escarbando tus heridas. También aparecen de pronto sueños, deseos e ilusiones que basan tu vida en un bucle de inconformismo con lo que puedes y lo que añoras tener... No pido tanto... Sólo un te quiero, un abrazo y un para siempre.

      Esta noche quiero alcohol. Quiero que, a base de alcohol, mis problemas se reduzcan al dolor de los tacones y al hinchamiento de mi pelo con la humedad. Perder el control bailando con una canción encima de una tarima de la mano de una amiga y mover las caderas de izquierda a derecha y bajar lentamente contorneando la cintura hasta llegar al suelo y subir al ritmo que la melodía me pida. Alcanzar el cielo con un cigarro y tocar las alas de los mismos ángeles al sentirte cerca, moviendo ese pelo que me trae loca desde que lo vi alzarse al viento. Cerrar los ojos a la vez que tus brazos rodeaban mis cuerpos y lo hacían girar una vez, dos veces... incontables para mi memoria que sólo se guió en seguir aquella canción que nos embrujaba y la sonrisa que en tu cara siempre estaba dibujada... 

     Y cuando menos te lo esperas, aparece tu sonrisa y el día más oscuro se convierte en el día con más claridad y belleza del año...

     Putos estereotipos humanos... Nunca nos dejan ver la increíble persona que puede esconderse bajo una vestimenta desaliñada y unos ojos rasgados de negro. Detrás de miles de apariencias, se encuentran personas. Personas que se encuentran solas y no encuentran su hueco. Personas que se apartan de la sociedad y se escabullen entre las sombras. Personas con sonrisas tristes y miradas vacías de sentimientos. Personas que bailan entre insultos y se miran cada noche en el espejo tapando un nuevo moratón. Personas que hacen una vida conducida por el odio y el maltrato. Personas como tú y como yo, que no merecen algo como eso. Al fin y al cabo, personas..

No sé lo que me pasa.. que cuanto más tiempo paso contigo, más te echo de menos.. Tengo la sensación de que te acercas y te alejas por momentos y me asusta el pensar que nunca podrás estar en mis brazos, sonriendo y bailando un vals conmigo muy lento, sintiendo como nuestros cuerpos se funden a la par que nuestros labios.. y que perdemos el control y nos amamos.. Y que perdemos la cabeza y nos rozamos... Y que notamos nuestras manos cerca y nos abrazamos... Y que te miro y te digo que te quiero.

RainyMood.com: Rain makes everything better.

RainyMood.com: Rain makes everything better.

Parece mentira que fuese ayer cuando aún estabas aquí conmigo, abrazándome y queríendome a la vez. El sentirte cerca tuya me hacía feliz. Me hacía tan feliz como cuando yo provocaba una de tus sonrisas más puras, aquellas sonrisas que me llevaban al cielo, como cada uno de los besos que me dabas, que me hacían volar de tu mano. Parece mentira que todo eso que fue tan bonito, sólo se tratase de un sueño que, por desgracia, nunca ocurrirá...

     Palabras... Aquellas que hoy día hacen eco en tu memoria, las que vagan cansadas en un rincón de tus recuerdos, palabras que te llaman haciendo mella en tus sentidos, palabras viajeras que nunca llegan a su destino, que te transportan a otros lugares, lugares que tú en otro tiempos visitabas, palabras que se clavan y te callan en el silencio, las que se insinúan en la oscuridad y se lanzan a tu cuello . Palabras que enamoran y te hacen mirar con atontamiento. Esas llenas de emociones que salen directamente del corazón. Palabras que acarician levemente el alma y la hace libre. Aquellas que susurran sentimientos entre lágrimas sinceras, las que ayudan y apoyan cuando sólo consejos  y un hombro hacen falta, las que señalan con manos desnudas a culpables ocultos, las que mismas que hacen llorar y duelen más que un puñetazo. Al fin y al cabo palabras.

Quiero que te acerques, un poco más de lo permitido. Quiero que me abraces y que no emitamos ningún sonido. Quiero que me mires y me sonrías con sigilo. Quiero que me beses y nos dejemos llevar por el destino...

No busco comprensión. No busco sonrisas en cada esquina de la calle. No busco soluciones fáciles o encuentros sellados por palabras que mejor hubiesen quedado escondidas. No busco el enamorarme rápido y el beso eterno. No busco el despertarme temprano y el trasnochar todas las noches. No busco el consuelo ni las lágrimas sin sentimientos. No busco secretos ni confidencialidad. No busco una luna llena cada noche reflejada en el espejo de mi habitacion. No busco páginas escritas con letras que no dicen nada. No busco la magia y la compañía. Busco a alguien como tú.

- ¿Qué te pasa? - Le dije mientras mi sonrisa se borraba por momentos.
- ¿De verdad no lo sabes? Llevaba tanto tiempo esperando este momento y al final... ¿Para qué?
Noté como su mirada caía a la vez que sus palabras me golpeaban el corazón y una lágrima descendía por aquella tez pálida hasta chocar contra la tierra mojada del campo donde tumbados se declaró. En esos momentos, sentí el impulso de besarle, besarle con tanta fuerza que mi marca quedara siempre en sus labios y que mi aliento invadiera su piel y sus sentidos. 

     No creo que pida tanto... Tan sólo me apetece ver su cara al despertar cada día de mi vida. Tan sólo me gustaría besarle mientras le quito el mando de la televisión. Tan sólo me encantaría poder arroparle por las noches cuando sintiese su piel fría. Tan sólo abrazarle por la espalda cuando menos se lo espere. Tan sólo respirar en su nuca y bajar lentamente por su espalda. Tan sólo sonreír y que esté conmigo, riendo a la par. Tan sólo quiero quererle y que me quiera....

Me encantaría que me vieras de otra forma. Que me miraras y sintieras ese cosquilleo que yo siento cuando me sonries. Que una sonrisa inquieta se instalase en tu cara cada vez que me vieras. Que el impulso de morderme la boca y hacerme tuya invadiera tu mente y hiciese explotar tus sentidos. Que me agarres con fuerza y no me dejes irme. Que me abraces, me beses, me acaricies, me tengas en tus brazos... Que me quieras

     Las cosas no cambian. Siempre se cambiará lo antiguo por lo nuevo aunque sigamos hablando de amistad. El saber que ha pasado el tiempo y que has tenido a esa persona a tu lado durante una gran parte de tu vida, te hacía feliz, te hacía pensar que nunca te faltaría, que consejos para ti siempre tendría, que lágrimas con pañuelos recogería y que tu mano nunca soltería. Pero el tiempo se lleva los años, se lleva el amor y se lleva amistades tan sólidas como ésta. Se lleva años de abrazos, años de consuelo, años de risas, años de ilusiones.. años contigo.

Vas caminando a través del pueblo y decides sentarte en uno de los bancos de la plaza que hay cercana a ti. Y, de repente, ahí está. De una esquina sale ella ya la observas andando. Directa a ti. Lo único que te apetece es sonreír para tu interior. Sonreír porque reconocerías cada palmo de su piel aún a tientas. Porque desde lejos sientes su aroma golpeando tus sentidos. Porque sus labios llevan aún la marca de los tuyos. Porque te mira con esos ojos inquietos y una risa nerviosa. Porque.. Y, justo entonces, abres los ojos y ves el techo. El techo blanco e inerte de tu habitación y sonríes amargamente a la vida porque de nuevo te la ha vuelto a jugar.

     Sueño con levantarme una mañana y descubrirte a mi lado. Sueño con un amanecer desbordante de luz colándose por la venta de nuestra habitación. Sueño con unos churros con chocolate en la mesita y la sensación de que la vida es perfecta al otro lado del alhomada. Sueño con un mechón de pelo cayendo por tu cara aún dormida, pero con muestras de felicidad. Sueño con un beso de buenas noches en mi frente y una caricia en mis labios por el roce de los tuyos. Sueño palabras que se escapan de la mente y vuelan hoy día a tu corazón. Sueño con música que rodea cada momento que compartimos, haciéndolo aún más especial si cabe. Sueño... sueño contigo

Es hora de..

 borrar los recuerdos que un día me hicieron soñar
y todas las palabras que aún me hacen volar
y que me hicieron creer que te podría alcanzar
es verdad, tú nunca me lo confirmaste
pero mediante gestos yo empeze a amarte
y ahora me quedan situaciones en las que salgo abrazándote
porque sin ti no hay respiro 
ni una sola luz en el camino...

     Porque sabes que andaría miles de kilómetros si sólo pudiese verte esta noche...

Bajando, bajando lentamente por tu cara, rozando tus labios con las yemas de mis dedos, notando tu tacto arrugando mis hombros, sintiendo tu respiración a mi espalda, besando tu cuello, notar un suspiro, desplazándome por los brazos y cayendo en tu estómago. Siempre besándote, siempre sintiéndote.

No puedo dejar de quererte. No puedo dejar de imaginar que algún día vendrás y me dirás que sientes lo mismo que yo y que empezamos algo nuevo entre las dos. No puedo dejar de soñar por las noches que estás a mi lado y me susurras acariciando mis oídos con tus palabras que me quieres. No puedo dejar de pensar que los días pasan rápido si estás cerca y demasiado lentos si no te veo. No puedo dejar de notar que te alejas por momentos y que la vida se me desploma al verte marchar, pero de nuevo me encanta ver como vuelves. No puedo dejar... no quiero dejar de quererte.

     Rodearte con mis brazos y no dejarte nunca marchar. Contemplar tu rostro y devorar cada una de las sonrisas que me dediques. Arroparte con mis besos y mis caricias tan puras como tu piel. Soñar contigo en las noches más oscuras y encontrarte en sueños bellos y luminosos llenos de tu vida y de tus cálidas carcajadas. 

¿Qué quieres oír? ¿Que ya no te quiero? ¿Que pasan los días y las noches y no me acuerdo de ti? No pienso decirte ni una sola mentira.. porque el pensar en no quererte ya es una locura.. porque no hay día en el que no sueñe con besarte en esa cara que me vuelve loca desde el primer momento en el que la vi y en esa boca que me lleva llamando desde antes de que te conociera, porque veo en ti el prototipo de persona que siempre he querido que estuviese a mi lado y que caminase conmigo hacia el infinito, porque eres tú la única persona que ha conseguido sacar este amor de mi interior, porque te quiero..

     Nunca creí en relaciones largas y relaciones cortas. Creí en el amor. Creo en que un día vas caminando por la calle y algo te golpea el corazón, como si lo atravesase de una sola vez y quedase una marca de aquel disparo hecho por Cupido. Desde aquel día en el que viste a aquella persona los días te parecían más claros, las noches más largas, las sonrisas más puras, el tiempo más lento y las miradas más sinceras. Va pasando el tiempo y cada  día sientes algo más grande y bello por esa persona. Crece, crece y sigue creciendo sin ningún control y sin ninguna atadura. Llega el día en el que la vuelves a ver, pero esta vez camina al lado de otra persona, a la que sonríe y besa con mimo, a la que le coge la mano con ternura y mira con ojos ilusionados. Sientes como cada parte de tu ser odia a la persona que va junto a ella, como el rencor y la ira recorren cada parte de tu ser impidiéndote el simple hecho de articular una palabra. El tiempo sigue pasando y la marca va dejando heridas cada vez un poco más pequeñas, pero siempre hay que usar un buen colirio para las heridas porque puede que un día, sin quererlo, vuelva a abrirse.

     Otro día más, me encuentro en este lugar oscuro y sombrío, mientras en el reproductor escucho una de las canciones de la oreja de van gogh, ese grupo que tanto me gusta. Mi cabeza da vueltas, como cada noche desde que te conozco. No dejan de pensar en tu sonrisa que se va borrando entre recuerdos de un ayer, en aquella mirada aniñada que me observaba entre los tramos horarios y no hacía caso a las voces que le gritaban, esos ojos transmisores de sentimientos escondidos en palabras cobardes que nunca serán dichas. Se paran a vislumbrar de nuevo tu boca, la que me llama y se ríe de mí a lo lejos. Y de nuevo, tú. Tú, solamente tú. Tu imagen me golpea la cabeza y los sentidos. Tu imagen, pura y venerada, ésa que tanto ansío y se que un día será mía.

Quiero…

Que una noche de verano, ambas estemos tiradas en cualquier lugar sin importarnos nada más que aquel momento, atraídas por la magia de la noche y el embrujo de la luna, mirándonos, sonriéndonos, dando la vida en cada sorbo que le dábamos a aquellas latas de coca-cola. Sólo esperaba eso, sólo eso. Que me miraras y me dijeras: te quiero. Que me sonrieras para siempre y que no te separases de mí, cogieses mi mano y que, bajo el silencio y la caricia de la luna, me besaras. Que todo miedo fuese eliminado de nuestro cuerpo y se convirtiese en pasión. Sentimientos que se fundían en la oscuridad de la noche, dos almas que buscaban ser amadas y dos corazones que por fin se unieron…

     Mi corazón palpitaba contigo a la espera de que tu boca encontrase la mía, algo que bien sabíamos que nunca llegaría ya que el tiempo nos dio lo que tenemos

  Imposible el describirte, imposible el observarte, imposible el soñarte sin amarte, imposible el mirarte y no sonreírte, imposible el compararte, imposible...
     Tan imposible como el imaginarte a mi lado y creerte conmigo.
     Tan imposible como el tener una vida en la que no aparezcas.
     Tan imposible como el pensarte y no llorar de dolor.
     Tan imposible como el sentirte cerca mía.
     Tan imposible como el tenerte en mis brazos y comerte a través de esos besos que nunca te llegué a dar.
     Tan imposible como el encontrarte fuera de mis pensamientos.
     Tan imposible como el caminar juntos de la mano.
     Tan imposible como el explorar tus sentidos con mis emociones.
     Tan imposible como el pactar con el diablo por un te quiero.
     Tan imposible como... el simple hecho de abrazarte.

     Una caricia que llegue a la piel, que erice mi bello y me ruborice como la primera vez que me tocaste, aquella primera vez que día a día recuerdo mientras mi almohada actúa como esponja de mis lágrimas...

     No dejaré de pensar que una mirada llena más que cualquier palabra vacía...

 Romper los relojes que nos atan al tiempo. Aquel tiempo que nos condiciona y nos hace esclavos de una vida ligada a horarios sin sentido. Sentido de amar, el que tú me haces notar. Notar que te acercas y morder mis labios. Labios que me llaman y me invitan a tu cuello. Cuello que suave acoge mis caricias. Caricias que sólo pueden ser creadas en tu espalda. Espalda donde sueño promesas inexistentes. Inexistentes como tus palabras. Palabras que encadenan sentimientos. Sentimientos que lloran por un silencio. Silencio entre tu boca y la mía. Boca que sonríe a la vida. Vida que ilusa duerme pensando en tu voz. Voz que callada, hace ruido. Ruido en mis oídos que aguardan tu mirada. Mirada que apasiona y nada en mi alma. Alma que ríe pensando en la ironía de tus te quiero. Te quiero que llena lo que alguien dejó un día vacío. Vacío en tus ojos y en tu corazón. Corazón que iluminado espera el tuyo. Tuyo es mi ser. Mi ser que se ahoga entre pensamientos. Pensamientos que, lentamente, me inducen hacia ti. Hacia ti mis ilusiones, mis tonterías y mis emociones. Emociones que congelan deseos ardientes. Ardiente como mi mano que escribe frases desesperadas en tu nuca. Nuca que quema mis sinrazones. Sinrazones como ésta, el amor, que condena al sufrimiento a dos tontos enamorados de un juego que palpita por tu querer...

     ¿Has sentido alguna vez que querrías decirle a una persona en cada momento lo mucho que la quieres? ¿Que tu vida sin ella no tiene ningún sentido? ¿Que las mañanas no tienen el mismo color si sus ojos no te miran? ¿Que  los sueños no son tan especiales si no aparece? ¿Que la oscuridad no te da miedo desde que su mano sujeta la tuya? ¿Que tus palabras tienen un destino desde que la tienes? ¿Que todas las caricias que creas quieres que vayan para ella? ¿Que tus ilusiones quieres que caminen junto a las suyas? ¿Alguna vez sentiste ese amor?...

      Desde el día en el que probé la dulce miel de tus labios, desde el día en el cual saboreé el pecado de tu boca, desde el día en el que nuestros cuerpos decidieron unirse bajo un eterno abrazo, desde el día en el que toqué tu piel con mis manos, desde el día en el que jugué con tu pelo en el cobijo de la oscuridad, desde la  noche en la que el cielo moría a nuestros pies de envidia, desde aquel día en el que miradas inquietas decidieron mirarse, desde el momento en el prometí dedicarte cada uno de mis pensamientos, desde el minuto en el que quise amarte hasta el fin de los días..

      Nada mejor que el silencio entre tu mirada y mi boca, ese silencio que nos condena en la noche a amarnos a querernos como nunca nos hemos querido, a besarnos locamente hasta que los primeros rayos del alba golpeen nuestra cara, soñar que camino por tu espalda imaginando que tu cuerpo nunca se va a separar del mío, volar por tu pelo en busca de sentimientos que salten a por mí, aquella sensación de que la vida era maravillosa desde que pusiste tu mano en mi espalda y me dijiste al odio: Te quiero

     ¿ Sentiste ese cosquilleo? ¿Recuerdas cuando por primera vez me viste? ¿Notaste lo mismo que yo? Aquella sensación de que todo era perfecto, que la vida nos sonreía después de tanto tiempo esperando encontrar algo como lo que nuestros ojos miraban, que subía por debajo de tus pantalones y te hacía parecer la mejor tarde, el mejor momento para conocer a alguien como ese ser al que observabas en la distancia, la urgencia de abrazarnos y gritarnos el amor que guardamos en los bolsillos de la inseguridad que poco a poco se escapaba por los agujeros de las ilusiones, el deseo de saber que el otro sentía lo mismo, que no sólo tú sentías que la vida podría ser maravillosa si te perdías nadando en sus ojos, aquel lago azul que sin palabras gritaba te quiero...

     ¿Recuerdas aquel  día en el que dijimos que cualquiera de nuestros sueños era imposible? Pues a día de hoy, estoy contigo, y tú eras mi sueño más preciado..

     Se acabó el llorar sin razón, el reír por aparentar, el querer por engañar, el soñar sin lograr, el pensar para lamentarse, el sonreír sin ganas, las caricias sin sentimientos, un amor sin pasión. Se acabó. Empezó el reír de verdad, el luchar por el amor, el pensar por saber, el sonreír sin razón y con vitalidad, el llorar de alegría, el querer por sentir, las caricias con ilusiones, el volar por soñar, soñar que te tengo, que un día podrás ser de mi propiedad, que caminarás a mi lado siempre, pero soñar es gratis y a la vez, irreal. Vive tu vida luchando por lo que de verdad quieres y sientes que en la vida debe ser tuyo..

     A manos del silencio, tu boca consiguió besar la mía, un beso que hoy camina en los prados de mi corazón y logra encontrar un sentimiento entre las sinrazones del amor escondidas en la maleza que bordeaba la isla de un querer imposible. Bajo la atenta mirada de un sol que abrasaba, un rayo de oscuridad cayó entre nuestros labios separándonos, nuestras manos se volvieron a unir después del miedo pasado. Mi corazón lloraba pensando que esa sería la última noche que la vida nos volvería a juntar. Nos refugiamos en una casa que andaba cerca nuestra, donde una vieja cama fue nuestro lecho. Mis manos recorrían tu cuerpo, tus pies fríos buscaban tímidos mi piel. El embrujo de la lluvia y la pasión se hicieron presentes en aquella habitación cuando dos corazones jugaban a ser uno. Las flores guardaban gotas del aguacero ya pasado en sus recovecos. La ventana ayudó a los primeros rayos del alba a posarse en nuestros cuerpos desnudos y abrazados, y con el alma en el puño y la ropa en otro, un beso de puro amor marcó el amargo sabor de la despedida.

     No sabes que hacer hoy? Por qué no sales a la calle e intentas hacer tu vida un poco más de tu color preferido? Saltar en los charcos que dejaron la pasada llovizna, sentarte en el banco de siempre con tus amigas saboreando la misma bolsa de todas las tardes, abrazar a la persona que te apetezca cuando te venga en gana sin tener que dar un porque, correr hasta que tu corazón te pida un descanso que no tienes pensado proporcionarle, viajar y conocer a personas capaces de cambiar tu vida, caminar por la calle y escuchar esa canción que te vuelve loca, y bailar y la gente te mire, pero que no te importe, decir lo que pienses en cuanto se te venga a la cabeza, saludar a esa persona que, por causa del olvido, no miras desde hace mucho tiempo, no gastar tiempo en discusiones que sabes que acabaran en una reconciliación porque la vida está para gastar tu tiempo en cumplir los sueños que tú quieras realizar. Porque los problemas que te calientan demasiado la cabeza sólo sirven para malgastar tiempo para cumplirlos

     Prisionera del tiempo, así me siento. Horas, horas y más horas que acaban todas en un mismo final. ¿Para qué necesitamos hacer las cosas a su tiempo? ¿Es que no tenemos toda la vida para hacer lo que nos apetezca? Me gustaría poder estar con él, amarrada a su piel sin un ritmo fijo todo el tiempo que yo así lo quisiese. Me encantaría poder disfrutar de un paisaje hasta que me duelan los ojos. Gritar al viento, darte un beso, saltar sin cuerda, correr sin pausas, soñar contigo, volar en un sueño, sentir lo que siento, morir por sus labios, respirar aire puro, caminar sin camino, cantar a voces, bailar sin control, marcar tu cara con una caricia, comerme un caramelo, notar un cosquilleo subiendo por mi espalda, rozar tu pelo, sonreír al alba, andar mientras llueve, mirar las gotas unirse en los cristales, beber un poco de alcohol, arder en tu garganta, encender la luz y saber que ha sido una pesadilla... ¿Por qué todo lo bueno lleva tiempo y despeina? No sé, pero lo que sí se es que pienso volverme una loca con tal de hacer todo lo que yo quiero y me gusta hacer

     Como un sueño, exactamente así eras tú. Algo que sólo podía ser irreal, que no llegase nunca a tocar la realidad que nos rodeaba. Me gustaba que fuese así porque sería algo por lo que yo podría luchar y ponerlo como meta, algo por lo que seguir el camino que la vida dibujaba junto al destino sólo para mí. Pero lo que me gustaba es que, por el hecho de ser un sueño, podría verle todas las noches, cada una de las que pasé pensando en ti acurrucada en mi almohada, añorando besos que nunca llegaron a darse y sollozando por caricias que en el pasado permanecen perdidas..

     Me gustaría poder imaginarme caminando de tu mano por aquellos campos que vagan aún hoy en los brazos de la memoria, correteando a tu lado, siempre con la sonrisa en la cara y con unos ojos que señalen que te quiero, que sin palabras puedan decirte lo que siento por ti y lo mucho que quiero vivir contigo. Me gustaría salir a la ventana y gritar apoyada en el silencio de la noche lo que realmente noto cuando estás cerca, cuando tus ojos se posan en los míos y tu sonrisa me sigue hasta que nuestras miradas dejan de verse. Me gustaría descansar en tu pecho, alimentándome de tu aroma que embriaga mi ser y abrazada a tu cuerpo que me invita a vivir contigo. 

     Que nadie te diga como debes hacer tu vida, porque tú eres el único responsable de los actos que hagas.

Recuerdas?

Yo también recuerdo día a día lo que pasó entre dos almas que buscaban ser queridas… el deseo de alimentarse una de la otra para saciar nuestro apetito amoroso… la sensación de que no necesitabas más que nuestros corazones para ser felices, eso que siempre estuvimos buscando y que sólo en los brazos del otro encontramos… pero el tiempo, enemigo del cariño y los sentimientos, nos separó… Quizá fue la envidia que nos tenía cuando veía que nuestras manos no querían separarse, que nuestras ilusiones bajo un hilo blanco se unían y tejían sueños juntas…o quizá fue que era lo mejor para ambos… pero quién sabe ya lo que nos separó? Sucedió y ya está…Sólo espero que algún día nuestras manos vuelvan a unirse y que en el recorrido de la vida, nuestras almas caminen juntas...

     Nunca llegará a ser lo que un día fue..

     Nunca te encajarían las piezas, porque nunca te conté las veces que entre la gente te miré, porque nunca te diste cuenta de todas las miradas que quedaron perdidas en el aire, porque siempre que te dije te quiero pensaste que fue un simple te quiero y ya está, porque diste por sabido que mi corazón buscaba sólo tu amistad cuando mi corazón ansiaba tu ser, ansiaba coger tu alma con manos suaves para que nunca se cayera de aquel alfeizar creado con el amor que brotaba por las rendijas de las heridas de mi corazón; porque jamás caerías en la cantidad de noches que pasé abrazada a mi corazón llorando desconsoladamente por un sueño tan irrealizable que hacía que mi ser se pudriera por todas aquellas lágrimas llenas de dolor y desamor, porque en la vida llegarías a saber lo que pude sentir por tí. Ahora me quedan recuerdos de un amor imposible que hoy día duerme en los brazos de Morfeo, junto a mis ganas de amar.

..

     ¿Cómo quieres que lo olvide si la última vez que nuestros labios se unieron prometimos algo que nunca llegó a los hechos? ¿Cómo quieres que lo olvide si creímos en las ilusiones basadas en sentimientos perdidos en el pasado, conociendo que no tendrían ningún futuro? ¿Cómo quieres que lo olvide si cada noche mis imaginaciones superan la ficción de cualquier cuento escrito para soñar? ¿Cómo quieres que lo olvide si tus ojos me enseñaron que, tras la brisa de una mirada, se podía querer? ¿Cómo quieres que lo olvide si después de que nuestros corazones hablaran olvidamos cualquier pena y nos fundimos en aquella pasión desenfrenada que envolvió mi alma y adormeció mi sentir? ¿Cómo quieres que lo olvide si poco a poco te convertiste en aquel vicio que mi boca no pudo dejar de probar? De verdad,  ¿Cómo quieres que lo olvide si fuiste, eres y serás lo que yo más he querido en este juego que es vivir?

     Vagando en la noche y por callejones que hoy ya no dibujan mi silueta al caminar, me pierdo en las imágenes de lo que fue una vida llena de promesas que sólo quedaron en palabras, ilusiones de arena que el viento se llevó en uno de aquellos días que compusieron un camino que no llevó a ningún lugar, tardes llenas de sueños que se perdieron en tu espalda al vuelo de tu pelo, sentimientos que tras año de llantos, caricias inexistentes, besos inalcanzables y sensaciones que nunca llegarían a notarse en mi piel... Aquellas imágenes que me recuerdan que la vida se compone de lo que tú quieras que se componga... Intenta componer la sinfonía de tu vida, para que en el momento en el vayas en el barco por las aguas del mar Estígia, dicho viaje sea llevadero al escuchar la melodía de tu paseo por el sendero de la vida...

Después de tí, no hay nadie L

     En la estación de los recuerdos, olvidé pagar el billete y cuando volvía al presente, miles de situaciones golpearon mi ser y me hicieron bajar de aquel vagón que me conducía al lugar donde los recuerdos se olvidan, donde no vuelven a aparecer jamás..

Trato de recordar en el momento en el que mi mente se perdió entre la silueta de tu cuerpo y preferí caer suavemente en tu espalda. Aquel roce de miradas que confundiría a cualquier ser divino que pasase por allí. Miles de sensaciones recorren mi cabeza al poder imaginar el besar tu dulce y apetecible boca, con la que sueño desde el primer momento en el que te vi. Ese día en el que supe que tenías que ser para mí, en  el que descubrí que tu sonrisa curaría cualquier de los malos que en mí pudiese haber y el día en el que noté que quería una persona como tú a mi lado el resto de mi vida…

Verano...

     Que el tiempo pase tan rápido que ni mi memoria pueda recordar ni uno de los momentos que pasaron en aquellos largos meses de primavera, que el calor del Sol anide en mi cuerpo y deje su huella en cada poro de mi piel, que el oleaje me arrastre hasta el fondo del mar, y que solo pueda escapar bajo el abismo de tu mirada, que la lluvia desaparezca por un tiempo y que el azul del cielo brille como nunca brilló, que detrás de la atenta mirada de aquel astro personas se enamoren en parques cargados de ilusiones, personas conozcan a alguien que puede cambiar su vida, personas que caminarán a tu lado por el resto de los días... La sensación de que cada día atardece más tarde, esa que tanto me gusta...

     Y que la lluvia caiga sobre mi cuerpo, al igual que aquellos recuerdos que se precipitaban en mi cabeza...

No me gusta la idea de vernos, porque sé que si me duermo en tus ojos, volveré a sentir lo que un día nació en mis entrañas. Esa sensación de poder reír y a la vez llorar al pensar en esa persona que se iba haciendo hueco entre los sentimientos de un corazón que se lamentaba al recordar que la última vez que fue tratado con amor se destrozó contra el suelo y que en busca de la reconstrucción muchos de los pedazos quedaron en el camino. El sentimiento de amar por primera vez hasta el hecho de notar como el corazón lloraba al sentirle cerca y saber, que aunque pasasen muchos años, el tiempo y los sentimientos nunca serían amigos, y el amor que siento no aminoraría, sólo crecería manteniéndose a base de caricias inexistentes, besos que aún descansan en la memoria de un futuro que nunca llegará, palabras que jamás fueron escritas ni pensadas, a base de imaginación, alas de un amor no correspondido que se perdió entre los nubarrones de la tormenta… Buscando en el amanecer de tu dulce mirada recuerdos de algo que nunca existió… Quemaré en la chimenea cada vez que tu mirada y mi piel se cruzaron, que nuestras manos quedaran unidas bajo aquel mal hilo por el que se tejen las sinrazones del amor, señales en mi memoria que indiquen que tus sueños fueron los míos que los que en mi cabeza rondaban… gestos y palabras que reclamaban mi ser…Sólo la luna conoce lo que un día coronamos con el nombre de amor.

Trato de recordar en el momento en el que mi mente se perdió entre la silueta de tu cuerpo y preferí caer suavemente en tu espalda. Aquel roce de miradas que confundiría a cualquier ser divino que pasase por allí. Miles de sensaciones recorren mi cabeza al poder imaginar el besar tu dulce y apetecible boca, con la que sueño desde el primer momento en el que te vi. Ese día en el que supe que tenías que ser para mí, en  el que descubrí que tu sonrisa curaría cualquier de los malos que en mí pudiese haber y el día en el que noté que quería una persona como tú a mi lado el resto de mi vida…

     Esperando al final que está a punto de llegar, me siento en la parada de autobús y me recoloco el cabello que el viento desplazó a mi cara, luchando por no mirar a las personas que me rodeaban. Siento miedo al hablar de fin, pero el ansia y las ganas de que esto acabase podían con cualquier inquietud. Me aferraba con fuerza al sabor de despedida y a la idea de montarme en aquel bus y que, tras hacerlo, mi vida cambiaría, cada parte de mi ser iría a un lugar diferente, aquellos con los que un día soñé, absorbiendo esencias de callejones llenos de alegría, aromas del mar Muerto, sentimientos de ida de seres especiales, el calor del sol, el silencio de la noche, el escozor de mis ojos contactando con la sal marina, cada una de las cosas que me gustaron o que me impactaron e hicieron el juego de la vida algo pasajero. De lejos, mis ojos divisaron al tiempo, siempre con prisa, sin poder detenerse para charlar y acompañarme un rato, porque con la única que hablaba era con mi incondicional amiga, soledad. ¿Por qué cada cosa tiene un tiempo concreto en la vida? ¿Por qué dormir de noche y vivir de día? ¿Por qué no puedo sentir el agua colándose entre los dedos de mis pies procedentes de un mar desafiante? ¿Por qué el tiempo me impide besarle siempre que se me antoje y las veces que mi corazón lo desee? ¿Por qué? Preguntas golpeaban mi cabeza y barrían mi memoria en un sin fin de inconformidades que nunca llegaré a comprender ni siquiera tendré tiempo de hacerlo...¿o sí? Nos queda un largo recorrido..  

24 días...

     Ya siento como el alma se va encogiendo poco a poco al ver que la esperada fecha se va acercando a nuestros corazones, sin pausa pero sin prisa... Como mi piel se vuelve pálida al recordar los momentos que viví en tu cofradía encerrada en las lágrimas que tu presencia me provoca solo al verte, tan deslumbrante como cada año... Te espero con los brazos abiertos y con el alma en las manos

Y si no..

Busca en la noche más fría, en la mañana más ardiente, en la hora más concreta, en la mirada más sincera, en el beso más dulce, en el sentimiento más fuerte, en la caricia más pura, en el silencio más profundo, en el lago más azul, en la brisa más fresca, en el amor más grande, en la canción más animada, en la letra más triste, en el cobijo más caliente, en la rendija más macabra, en el nocturno más bello, en la sonrisa más pícara, en el amanecer más hermoso, en la voz más clara, en el abrazo más eterno…busca lo que en realidad se llama felicidad. Si no la encuentras..suerte en la próxima ;D

Gimme more…

Que las caricias se conviertan en el deseo, que tus besos caigan sobre mi cuello, que nuestras manos queden unidas por querer buscar un sueño, que un día quedó escondido en los brazos de Morfeo. Pasear por las curvas de tu cuerpo hacia ningún lugar y no pensar en despertar de este duermevela queriendo que no exista algún final. Amanecer en tu pecho y dormirme de nuevo en tus labios. Manifestar un te quiero con el roce de mis dedos que fallecieron en tu espalda bajo el espejo de tu mirada…

No dejaré de luchar por un beso de la dulce boca por la que muero...

Ahora que el mundo quiere derrumbarse ante mis pies, me vienen a la cabeza recuerdos.  Recuerdos que reflejan lo que fui un día y lo que soy ahora. Recuerdos que gritan sin decir nada. Recuerdos que ensordecen el silencio. Recuerdos que enmudecen las voces y ahogan palabras al volver a la mente. Recuerdos que entristecen tu existencia. Recuerdos que te hacen ver, que sólo son eso y que nunca volverá a pasar algo igual o simplemente, parecido. Recuerdos que te envían a otro lugar y te hacen pensar que estas allí, que puedes tocar a esas personas con las que viviste ese momentazo, que puedes volver a sentir lo que sentiste cuando una noche de feria te besó, cuando se le cayeron los libros por patosa y le ayudaste a recogerlos, cuando le llamabas guiri, cuando le chocaste con el coche en los choques, cuando te dijo por primera vez ñeña… cuando te la presentaron en aquel cumpleaños... y crees que podrás sentir lo mismo en tu cansado cuerpo, pero lo que sentiste en ese momento, no volverá a repetirse.. Si no que volverá para quedarse y triplicarse, porque desde ese momento, sabías que ibas a vivir los mejores momentos de tu vida con ellos.

Me perdí buscándote, siguiendo las huellas que tus pies dejaron en aquella playa que bordeaba nuestras vidas.
Me perdí, sintiendo que tu olor pasaba cerca de las palmeras que llenaban aquel islote al que solemos llamar corazón.
Me perdí, tocándote en la nada pero sintiéndolo todo, a la captura de la última vez que te besé.
Me perdí, cuando oí como el viento rozaba tu espalda en la otra esquina del alma.
Pero siempre se encuentra lo que se busca... y yo sólo pude encontrarme en el reflejo de aquellos ojos cristalinos, que me dan una bocanada de vida en cada una de las miradas que me regalas, sólo pude encontrarme al poder notar tu ser al lado del mío, observándome sin decir nada, pero cualquiera de las sonrisas que me brindas hubiesen valido más que cualquiera de las palabras que tu boca pudiese decir. Sólo cuando tu boca y mis labios se besaron, nuestros seres se unieron sólo cuando las estrellas nos miraron con envidia y desprecio al descubrir aquel vínculo que nos unía y que por nada en el mundo permitiría que algo destruyese.. porque sólo contigo conseguí encontrarme

¿Para qué vamos a esperar el cambio? ¿Para qué queremos que las cosas pasen como uno quiere? No podemos obligar al destino para que nos ofrezca alegría, deseos que en nuestra cabeza intentan salir, no.
Hay que aceptar las cosas, tal y como tengan que pasar. Quizás la vida nos ofrezca unos momentos que posiblemente sean los peores, pero tenemos que pensar que la vida nos puede devolver todas y cada una de las cosas que el destino nos quitó. Porque el deseo y el destino son dos niños pequeños que juegan a la vida.

     Cerrar los ojos para no querer ver lo que ocurre a nuestro alrededor. Para no ver que el mundo nos engulle y que nosotros hemos acabado con él, ahora viene a acabar con lo que nos pertenece por todo este tiempo que hemos hecho lo que nos parecía...Miles de familias llorando bajo la espera de noticias que saben que nunca llegarán..noticias que se perdieron bajo aquella sociedad que bajo una nube de amargura ahora se cierne. Angustia, silencio y desesperación, rostros sin nombre preocupados por aquella nación. Impotencia en el alma y lágrimas en los ojos, lo único que pueden hacer ahora es ver como toda su vida es arrastrada por el mar..

La música, ésa que amansa a las fieras y que ayuda a hacernos un pelín más felices.. La que por las noches nos duerme y por las mañanas nos levanta, la que nos hace coger el mango de la fregona y cantar y querer comernos el mundo como si de las cantantes nos tratáramos, perder el poco control de la situación y volverte un poco más loca de lo que normalmente estás acostumbrada a ser, la que entra en nuestro ser y hace que nuestras caderas se muevan sin control de un lado al otro, nuestra cabeza pierde todo sentido y cerramos los ojos, nos imaginamos otro lugar, al más romántico de los jardines o al más heavy de los parques, como una bala que te atraviesa y que es imposible de extirpar, así es la música, deja huella en ti, en tus pasiones, en tus sentamientos y emociones, en todos tus sentidos. Levantar las manos cuando la canción rompe y no poder parar de mover los pies, bailar bailar y bailar... Emocionarse con una canción al recordarnos ese momento tan especial o a esa persona que con el paso del tiempo siguen nuestros brazos implorando, aquella tarde tan graciosa o aquel beso tan dulce. Esa mirada que te llenó de vida, su mano junto a la tuya dibujando corazones en el cielo, Saltar, saltar y volver a saltar con el ritmo en tus pies, alegría que se contagia, pena llevadera, amistad entre líneas, amor bajo unas letras, reivindicaciones en un mismo son. Querer gritar, querer soñar, querer volar, querer encontrar… Y pensar que cuando bailamos..todos los cuerpos van a un mismo son, cuando nos reunimos en la pista, dejamos las peleas atrás y nos dejamos llevar por esa magia que la música nos lleva…Miles de sentimientos bajo el nombre de una canción…